A después de 26 años, el hospital municipal de Heinsberg (Städtisches Krankenhaus Heinsberg) sustituyó su lavavajillas de cinta transportadora HOBART obsoleto por uno nuevo de la FLOW Line. Tanto los pacientes, como el personal y los visitantes disfrutan del catering diario tan distinto a lo que suele asociarse a la comida de hospital.
Aquí, el servicio es realmente excelente. La pequeña población de Heinsberg está situada al norte de Aquisgrán, justo en la frontera con Holanda. Aquí fue donde se inventó el licor de huevo en 1876, si bien los lugareños siempre están contentos, aunque no hayan bebido. Con apenas 187 camas y unas 600 personas de personal, el hospital municipal de Heinsberg es bastante pequeño. La cocina del hospital utiliza un proceso de cocinar y abatir (cook & chill) para producir unas 600 comidas al día, además del desayuno y la cena para los pacientes, así como un catering externo para distintas guarderías, escuelas y residencias de ancianos. La cafetería interna del hospital ofrece a los visitantes y al personal un mostrador para self-service de ensaladas, platos fríos y calientes, así como deliciosos pasteles y tartas elaborados por su propio pastelero.
«Nuestra comida es tan deliciosa que hay personas que vienen a comer expresamente o a comprar pasteles para llevar», comenta Frank Seibert. Ha dirigido la cocina y ha sido el alma de la misma durante 32 años. Disfruta trabajando con su equipo formado por 16 empleados y siempre tiene muchas cosas interesantes que comentar. Él es una de las principales razones por las que hay tantas risas tanto en la cocina como fuera.
La tecnología moderna ahorra recursos
Diez empleados a tiempo completo y seis empleados a media jornada se encargan del catering que debe suministrarse cada día del año. Durante muchos años, una empresa externa se ha encargado del área de lavado en un modelo de tres turnos; todo está bien ensayado y funciona sin problemas. El hospital empezó a utilizar la técnica de lavado HOBART ya en 1998.
Limpieza dentro y fuera
«No queremos lavar solo platos, sino también sartenes, utensilios y bandejas, y hay muchos materiales distintos. Gracias a la nueva máquina y a su sistema de reconocimiento por cámara, todo funciona perfectamente y estamos realmente contentos con los resultados», comenta Seibert, que no le quita ojo al lavavajillas mientras está funcionando en la cocina y se asegura de que funcione correctamente y se lave a fondo. «Al limpiar un lavavajillas, el personal tiene que ser consciente de que si el interior no se limpia a diario, es posible que el menaje no esté completamente higienizado", añade con conocimiento de causa. Fue él quien precisamente estableció los procesos con el equipo de limpieza y, gracias al marcado por colores de las piezas extraíbles dentro de la FLOW Line, el proceso de limpieza resulta muy fiable.
Una nueva tecnología, nuevos espacios
La FLOW Line se instaló en Heinsberg hacia finales de 2024. El área de cocina se rediseñó con la llegada de la nueva máquina: el área de lavado se trasladó a una nueva ubicación donde hay un sistema de aire acondicionado nuevo, ventilación y ventanas. Todo esto ha mejorado considerablemente las condiciones de trabajo del personal encargado del lavado de vajilla.
Buena relación calidad-precio
René Tellers completó su formación como electricista en el hospital de Heinsberg en 2010 y, actualmente, es el director técnico. Entre sus tareas se incluye responsabilizarse del equipamiento técnico del área de lavado. «Nos decidimos por la nueva FLOW Line basándonos en nuestra larga relación laboral con HOBART y su buena relación calidad-precio»,
nos explica. «La máquina más moderna reduce los costes operativos y nos ofrece una vista general muy buena de los datos de energía y de consumo. Desde la instalación de la nueva máquina, hemos reducido el consumo de agua y los costes operativos». Para él, una de las ventajas más claras es que la FLOW Line tiene un diseño parecido a su antecesora, de modo que puede solucionar pequeños problemas por su cuenta y no se producen interrupciones en los lavados.